Hace casi ya 10 años que leí mi tesis doctoral sobre los cambios de la industria cultural y del imaginario en la época de la movida. Desde entonces me ha interesado analizar el funcionamiento de la industria de la música. Cuando la música se hizo digital, pasé por todos y cada uno de los programas de P2P: Napster, Audiogalaxy, Limewire, Gnutella, Emule, Megaupload... Asistí con estupor a batallas sin sentido en nombre de los derechos de autor. Sentí la necesidad de saber más del tema si quería entender las lógicas de cada una de las partes y me matriculé en un máster de derecho de la propiedad intelectual. Ahí aprendí otra cosa: la ley es autista, ignora el saber acumulado por otras disciplinas. Nadie sabía nada de la historia del copyright, de la controversia sobre la figura del autor en la postmodernidad. Nadie había escuchado la palabra intertextualidad. Además, me aterró ver como muchos especialistas se agarraban a las lógicas de los viejos medios para entender (y, lo que es peor, legislar) sobre los nuevos.
Desde entonces, intento analizar el mundo de la música desde la confluencia de las tecnologías, las lógicas de creación y recepción y las leyes que pretenden regular ambas. Tecnología, cultura, derecho, música. Me interesa especialmente entender en qué consiste crear música hoy, cómo los géneros contemporáneos desafían a ese autor original,a ese creador romántico tocado por el genio. El creador, ahora, es un mezclador, un tipo que a veces recoge influencias y géneros y tradiciones, otras veces reúne fragmentos de canciones, otras transforma un tema de arriba abajo. Quiero escribir un libro sobre eso. Me estoy documentando. Este blog es una forma de ir poniendo en orden mis ideas y mis lecturas, y probablemente también una forma de reunir mis fuentes. Se admiten sugerencias, reclamaciones y explicaciones.
Muy interesante tu apuesta. Espero que nos ayude a todos a conocer un poco más nuestro mundo y nuestra cultura. Muchos ánimos.
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